La revolución del streaming

Fecha
February 12, 2024
Categoría

Pasado, presente y futuro de una industria disruptiva.

Por años, el entretenimiento había sido principalmente asociado al mundo cinematográfico, con pequeñas y grandes producciones por parte de estudios tradicionales o independientes, y los Óscares como su más reconocida autoridad. Los grandes estrenos se realizaban en las salas de cine o en los principales canales de televisión de los países con mayor acceso y presencia en la industria. Sin embargo, desde los inicios del siglo XXI se comenzó a construir una industria adyacente que terminaría por revolucionar el entretenimiento como lo conocíamos.

Blockbuster llegó a tener 9,000 tiendas en todo el mundo pero se negó a comprar a Netflix cuando recién aparecía.

Con la fundación de YouTube en 2006, se replantearon los criterios para publicar y difundir un video. Cualquier persona con una forma de grabarlo y acceso a internet podía poner su creatividad al alcance del mundo. Un año después, llegó el “actor principal” de la revolución: En 2007, Netflix introdujo su sistema de streaming por internet, poniendo a un clic de distancia todo su repertorio de películas y series de televisión. Esta compañía comenzó como un servicio de renta de DVD’s por correo y no fue hasta que YouTube pensó en una forma de poder ver videos de calidad a altas velocidades de carga que Netflix pudo ser lo que es hoy. A este le siguieron Hulu, Amazon Prime, Apple TV, Google Chromecast, todas consolidándose en el ecosistema de transmisión de entretenimiento por internet.

Netflix comenzó en 1997 como una compañía de renta de DVDs por correspondencia.

Desde ese momento, las películas y series estarían disponibles donde sea que hubiera conexión. Por medio de una cuota mensual, las personas podían acceder a inmensos catálogos de entretenimiento, “ponerle play” y pausa a lo que estaban viendo, elegir la hora a la que querían disfrutar de su programación, hacer su propio perfil dentro de la plataforma, entre muchas otras opciones de personalización más. Además, las y los usuarios podían calificar cada pieza que veían, con lo cuál otras personas podían saber qué tan recomendado era lo que estaban a punto de ver. Con el paso de los años, las grandes cadenas de entretenimiento, e inclusive empresas de tecnología, comienzan a ser parte de este movimiento digital. Cosa que no suena más que lógica, teniendo en cuenta que los ingresos de la industria del streaming llegarían a los 72.2 mil millones de dólares en 2021. A día de hoy, Disney, HBO, Paramount, Warner e inclusive Apple cuentan con sus propios servicios de streaming.

Sin embargo, se dice que el gran hito de esta industria sucedió en 2013, cuando Netflix lanzó su primer serie original: House of Cards. Con ella, Netflix demostró que los servicios de streaming no solo tenían la capacidad de difundir, sino también de crear contenido de gran calidad que millones de personas querrían ver. Esto se confirmó a inicios de este año, cuando CODA, una producción original de Apple TV+, ganó el Oscar a mejor película del año.

“Con esta victoria, Apple colocó las últimas piezas de la toma de poder del streaming. Con inmensos presupuestos y audiencias cautivas de millones de suscriptores, los servicios de streaming han superado a los estudios de cine, demostrando que la ‘pantalla pequeña’ es igual, si no es que más importante que la pantalla grande.” (The Morning Brew).

Ahora no sólo somos testigos del nacimiento de más y más servicios de este giro, sino de alianzas estratégicas entre servicios de streaming y medios tradicionales que buscan sacar el máximo provecho de esta revolución.

¿Qué podemos esperar de esta industria?

Es increíble como tiempo atrás, los consumidores se rehusaban a pagar por más de un servicio de suscripción. Frases como “¿por qué voy a pagar por HBO si ya tengo Netflix?” quedaron en el olvido y hoy está confirmado que al menos una persona con una servicio de streaming cuenta con al menos una subscripción de otra compañía. Pero ¿cuál es el futuro de esta industria? Se ha especulado sobre la caída de este imperio al haber perdido mas de 200,000 suscriptores de Netflix en el Q1 del 2022 .

“Netflix closes down 35% wiping more than $50 billion off market cap” — CNBC

Netflix dijo que varias cosas están afectando el crecimiento, incluido el aumento de la competencia y el levantamiento de las restricciones pandémicas. El negocio del transmisor de video se benefició de las órdenes de confinamiento a principios del coronavirus y esto trajo consigo que más personas están buscando entretenimiento digital. Pero en los últimos meses, las personas han pasado menos tiempo en las plataformas digitales a medida que se implementaron las vacunas y se relajaron los mandatos.

Ahora, Netflix está reconsiderando varios principios básicos que alguna vez lo convirtieron en el rey del incipiente mundo del streaming. El codirector ejecutivo, Reed Hastings, dijo que la compañía está explorando niveles de menor precio con publicidad en un intento por atraer nuevos suscriptores después de años de resistirse a los anuncios en la plataforma.

Aquellos familiarizados con el espacio de transmisión sugieren que podrían ocurrir más cambios, incluido un enfoque más fuerte en el contenido de franquicia e incluso un cambio en los lanzamientos escalonados de nuevo contenido episódico.

¿Qué podríamos aprender de este caso y cómo podrías aplicarlo a tu negocio? ¡Queremos escucharte! Visítanos en www.kinez.services o encuéntranos en Instagram como @kinez.services y LinkedIn como Kinéz.